Me tomo la libertad de responder, como militante de IU, por alusiones, a su artículo de fecha 14 de febrero, publicado en La Verdad, en el que se dirige a quienes estamos afiliados en Izquierda Unida de Torrevieja, alentándonos a estar atentos a los pasos que sigue nuestro cabeza de formación, el sr. Martínez Andreu.
En primer lugar, he de informarle que la petición de fiscalización de la permuta -que hace referencia a su empresa, Rubio Motor S.L., y que le beneficia económicamente a usted- está presentada con el acuerdo de todo el grupo municipal y de los militantes de base de IU, que, contrariamente a los militantes de otros partidos, somos siempre informados y consultados sobre las acciones que nuestros representantes toman respecto a la gestión municipal, mociones, denuncias, y peticiones de fiscalización, como la que en su caso le afecta. Por lo cual, quédese usted tranquila, porque el sr. Martínez Andreu no ha presentado esta petición de fiscalización a la ligera, ni como iniciativa personal, sino en representación de IU, y de nuestra labor de oposición, ejerciendo nuestro derecho -y nuestro deber- democrático al exigir al gobierno del PP la misma transparencia que nos exigimos en nuestro grupo, como obliga la ley y el bien público.
Se diría que usted quiere dar lecciones al sr. Martínez Andreu de política aplicada -aun cuando usted ni siquiera ha llegado a aprender algo del funcionamiento de un motor-, y, por lo que parece, confunde la política, que es la administración de los bienes públicos en beneficio del común de los ciudadanos, con acuerdos y componendas que benefician a su empresa y no al Ayuntamiento de Torrevieja, que debería representarnos, cosa que habla de su astucia como empresaria; pero la desacredita moralmente para hacer juicios de valor imparciales respecto a las actuaciones de cualquier grupo de oposición honesto, que antepone los intereses de todos los ciudadanos y la aplicación estricta de la Ley frente a los intereses espurios de unos cuantos.
Teniendo en cuenta los antecedentes de presuntas irregularidades cometidas en este tipo de permutas, siendo responsable de la gestión el PP de Torrevieja en materia de urbanismo, según el informe de la Sindicatura de Cuentas -de 109 páginas; sería bueno que lo leyera, tanto usted como el nuevo delegado de Urbanismo, Francisco Moreno, que confesó desconocerlo en el pleno municipal en el que Martínez Andreu le preguntó sobre otras permutas, para que comprenda hasta qué punto es grave-, es nuestra obligación vigilar y señalar las irregularidades que perjudican al común de los ciudadanos.
No es inteligente que mantenga usted los ojos cerrados, defendiendo como causa propia y personal la pésima gestión municipal del PP -por no hablar de la discutible interpretación que hace de la Ley de Administración Local, al utilizarla para beneficiar y defender sus intereses empresariales-; mientras se dedica a advertirnos a los afiliados de Izquierda Unida sobre nuestro representante, que realiza un trabajo transparente e intachable en defensa de los intereses de quienes le hemos votado y del resto de los ciudadanos torrevejenses.
Como militante de IU, le puedo asegurar que Martínez Andreu no actúa por ningún interés económico, personal, ni al margen de los militantes y del colectivo de personas que rechazamos el urbanismo salvaje, la corrupción, los amiguismos, el nepotismo y que defendemos la transparencia en la gestión del dinero y de los bienes públicos. Es decir, todo lo contrario de lo que usted y el el PP local representan. Velar como representante de los ciudadanos para que una permuta no perjudique al Ayuntamiento y se atenga a la ley estrictamente no es un agravio personal, doña Concepción, y no debería provocar su indignación contra nuestro representante por IU, Martínez Andreu, que tan sólo cumple con lo que por ley es su obligación. El tema es si el resto del Gobierno torrevejense la cumple.
Aunque sean amiguetes suyos, y viejos conocidos, he de recordarle a usted que también son viejos conocidos de la Fiscalía Anticorrupción, que tiene pendiente contra ellos alguna que otra causa por prevaricación, tráfico de influencias o tráfico de información privilegiada. También son viejos conocidos en otros juzgados que investigan adjudicaciones presuntamente irregulares, el destino de 15 millones de euros, áticos ilegales, recalificaciones fuera de lugar, etc.
En fin, sra. Miralles, entiendo que le importune que Izquierda Unida exija la fiscalización de su expediente de permuta; pero entienda usted que el acuerdo de diciembre de 2000 (1) es cuanto menos sospechoso, por mucho que diga usted que sus empresas nada tienen que ver con temas inmobiliarios ni especulaciones de suelo, no podemos pasar por alto la posibilidad de otro pelotazo con cargo al erario público, y, como nadie debe ni puede estar por encima ni al margen de la ley, es por lo que le rogamos ponga usted a disposición de los órganos competentes la documentación e información necesaria para que se fiscalice el expediente de permuta 160-PT, realizada entre el Ayuntamiento y la mercantil Rubio Móvil.
Saludos cordiales,
Estefanía Montero Cerro
Afiliada y militante de Esquerra Unida de Torrevieja
(1) El Ayuntamiento «suscribe un convenio urbanístico con las mercantiles Rubio Móvil S.L, Rubio Motor S.L, y con Concepción Miralles Miralles para la ejecución de viales de servicio», por el que las empresas cedían terreno para los citados viales a cambio del compromiso del Ayuntamiento de permutar la finca de «Pozo Dulce», cercana al IES nº2 «Las Lagunas» y el centro Alpe, por otra de propiedad municipal en el plazo de un año, previendo una indemnización de 35.000 pesetas por metro cuadrado urbanizable si no se cumplía dicho plazo.
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