Poco tiempo después de un senderismo organizado por la Asociación de Vecinos de San Miguel de Salinas, se impone poner unos puntos de reflexión sobre un lugar de importancia histórica para la Vega Baja. Acudieron a la marcha 24 «hikers» y Jon Oria apuntó a los hitos de la ermita como cruce de un entramado de caminos, algunos antiquísimos como la Via Augusta Romana, que adelantaba por allí y que venía desde Atenas pasando por Roma en dirección a Cartagena, terminando en las costas del Atlántico. Sería igualmente el punto de referencia de los caminantes por las vías pecuarias hacia Orihuela por el Norte, San Miguel de Salinas por el Oeste, La Laguna de Torrevieja y el sendero de Lo Reche por el Sur y Los Montesinos y Rojales por el Este.
Habrá que señalar algunas de las fechas de su larga historia, en gran parte oculta por los azares de los tiempos, hasta que en el siglo XVII llegan los jesuitas de Orihuela para adecuar la entonces capilla-ermita a las necesidades de una partidas de colonos agrícolas, mencionando el año 1723, cuando se les provee de agua con un aljibe y más tarde con una pequeña escuela para la educación de los más pequeños. En 1920, tras el terremoto, se procedió a su conservación, aunque más recientemente el edificio con el parque ha sido cedido por los propietarios del poblado de casas al pueblo de Los Montesinos para su restauración, pues había señales de deterioro en tejados y muros.
El edificio de la ermita se encuentra en el extremo izquierdo de una plaza, como parte integrante del poblado agrícola. Bajo la denominación de Virgen del Rosario, la ermita consta de una planta rectangular de cruz latina: una central con altar mayor y dos capillas trasversales del Santo Cristo y de la Inmaculada. Su torre, con cuatro campanas de bronce, es verosímilmente de una época anterior, como lo testifican las saeteras de su parte inferior, que servían antiguamente de defensas. La iglesia de la Marquesa es anterior a la de San Miguel de Salinas y a la de Los Montesinos, para los que sirviera más tarde de parroquia. Tras su presente restauración, hará de capìlla-ermita en las celebraciones de las romerías del Rosario durante el mes de octubre.
Cabe señalar los restos de un antiguo aljibe a la entrada de la propiedad, hoy en día en estado de ruina, que consta de una bóveda con cubeta de decantación de aguas pluviales. Hay documentación de su existencia desde mediados del siglo XVIII y es uno de los muchos aljibes de la zona que necesitan restauración como patrimonio histórico, lo mismo que los restos de la antigua almazara para la producción del aceite, ahora bajo las ruinas de lo que fuera la mansión señorial de la Marquesa, que conocimos adornada de fuentes y cascadas, rodeada de un palmeral que simulaba a Elx.
¿QUÉ ES LA CULTURA?
La definición se le escapó de soslayo a Platón como la preservación de lo conocido, que F. Nietzsche matizaba como «La cultura es lo opuesto a la patanería del descuido», según el sabio Zaratustra.
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