Pero nos queda el Obispo de Roma

En esta mañana plácida de miércoles, desayunando a dos, con una valiosa dosis de tranquilidad y de casi un silencio apenas agrietado por la conversación que se desarrolla pausada y en murmullo, venimos a convenir, mi interlocutor y yo, en la casi necesidad de ausentarse a ratos, y a ratos grandes, de lo que nos rodea y nos percute, aquí en la cabeza…Las señales nos vienen por los canales de siempre .A la prensa la radio y la televisión se le han sumado con estropicio, las redes sociales. Porque aun apartando el ochenta por ciento de la información que es sub-prime,(como las hipotecas basura), novelesca pero de novela rosa y deportiva fetén del fútbol que nos llega, también el otro veinte por ciento, que no debiera ser igualmente vacuo, tiene su “ángel” desestabilizador en nuestro ánimo…¿Porque de verdad hay alguna cosa por la que merezca la pena reflexionar.?

Nuestra ciudad es en estos días, junto a todas las asentadas en el llamado corredor mediterráneo, un claro exponente de lo que pudiéramos denominar como la implosión del fulgor vital necesario para una sociedad que marca sus tiempos, vive sus tiempos, y se recrea cíclicamente en sus tiempos. Verano azul se nos antojó hace décadas llamarlo y no sé por qué lugar podemos estar ahora en un muestrario de colores. Es la vida que transcurre inmisericorde por las hojas del calendario. Y de qué manera.

Sí, ausentémonos a ratos grandes pero no seamos tan pesimistas pues aunque los malvados alemanes nos vigilen estrechamente como el padre al hijo adolescente, saldremos de la crisis…¿Digo crisis?. ¿Qué crisis?. Si eso es de otros que ya están rescatados. Además, nosotros los españoles siempre tendremos como dice el ínclito Bono (el cantante no, el otro), el gobierno de concentración auspiciado y sostenido faltaría mas, por el más leal y conspicuo personaje de la España de hoy. El amíc Durán, demócrata y cristiano como pocos…

Yo he hecho una invitación para hacer un alto en el camino y asistir a las Jornadas Teologales impartidas esta semana por el Dr. Flecha Andrés, Catedrático de Teología Moral en la Universidad Pontificia de Salamanca. Seguro que no nos dejará indiferentes a quienes ostentamos ya desde hace muchos años el rango de devotos oyentes. La clausura será esta tarde-noche a las ocho y media en la Parroquia de la Inmaculada.

Pontificia he escrito. Pontificia que viene de Pontífice. Del que nos llega a Madrid dentro de unos días, de Benedictus PP XVI, que siguiendo la estela de su predecesor, estrechará lazos de amistad verdadera en Cristo, con millón y medio de jóvenes venidos de todas partes del mundo.¿No merece la pena nadar contracorriente para poder preguntarse, los jóvenes, el sentido y el rumbo y la finalidad de su vida?. Aquellos que encuentren esa amistad y den testimonio, se llenarán de luz y de gracia contagiando a muchos con la palabra del corazón que es la que El conoce y aprecia mejor.

10 agosto 2011
JortizrochE

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