Ha sido patético y penoso ver al jefe del Estado, pidiendo disculpas con un “Lo siento mucho. Me he equivocado. No volverá a ocurrir”. Escasos 29 segundos para transmitir este dramático, mea culpa, del rey a la salida de la clínica.
Son tantas y tantas cosas, las que hemos oído estos días pasados en favor y en contra del monarca que por innumerables, no podemos comentarlas todas.
Justamente una de las que más atención me ha llamado, ha sido el día 19/4, fecha de alta del rey. Decía más o menos que “como sigan los medios de comunicación ahondando en esta información, acabaremos irremediablemente en una república”.
Entre las muchas cosas que han emitido los monárquicos, es que en los principales países democráticos del mundo están gobernados por monarquías democráticas; éste es el caso de 8 ó 9 países a nivel mundial, como el Reino Unido, Holanda, Dinamarca, Bélgica, Noruega, Suecia y Japón; entre todos ellos, representan aproximadamente el 3% de la población mundial. Rusia fue una monarquía muy potente, pero hoy es una república al igual que EEUU; dos de los países más poderosos del planeta.
Otra de las cosas que nos cuentan los defensores de la monarquía es que es “más barata que la república”. Yo siempre digo lo mismo; que nos lo demuestren. El problema radica en la falta de transparencia en los presupuestos generales del estado, donde únicamente hacen referencia de una forma directa a los 9 millones de euros que recibe la Casa Real, por tanto, no hay más cantidades y cifras que hagan alusión a los costes de la Casa Real, de ahí, resulta el decir lo barato que nos sale la Casa Real.
Sin embargo, lo que no conocemos los españoles son los grandes gastos que ocasiona la Casa Real al Estado. Las otras grandes partidas están incluidas dentro de las partidas de los distintos ministerios y departamentos. ¿Dónde van cargados los gastos derivados de toda la plantilla administrativa de la Casa Real? Seguramente al Ministerio de Administraciones Públicas, hoy dependiente de Hacienda. ¿Y los gastos del Parque Móvil?, ¿Los gastos del Ministerio de Defensa de los 1500 efectivos militares que trabajan en la Casa Real?, ¿y los gastos del mantenimiento y manutención de los distintos palacios y viviendas de la casa real, que están a cargo de Patrimonio Nacional? ¿y los gastos derivados de los viajes al extranjero a cargo del Ministerio de Asuntos Exteriores?. En lo concerniente a los gastos de un Estado, en una monarquía o república deberán primar dos variables, el PIB y el número de habitantes de un país. Obviamente no deberán ser los gastos los mismos en la monarquía danesa que la española o la inglesa.
Desde 1993 que se publicó el libro “Juan Carlos I”, por lo que se conocen con más detalle determinadas actividades del rey, tanto económicas como personales, y que, desde entonces hemos tenido noticia los españoles de muchas actividades de caza y lúdicas del rey en estos últimos años. Como el mismo monarca dijo en su anterior mensaje navideño, las personas con responsabilidad deben actuar como tales, por tanto, los españoles no esperábamos de nuestro monarca un comportamiento tan irresponsable. No se puede estar cazando elefantes Botsuana, mientras en España estábamos en una semana negra y el ejecutivo estaba recortando derechos a los españoles.
Por eso no creo que sea suficiente pedir disculpas a los españoles por parte del jefe del Estado cuando se cometen errores de este calibre. Hay otros medios para rectificar las conductas. Un político cuando se equivoca, los ciudadanos no le volvemos a votar, pero, ¿qué hacemos con un rey y parte de su familia que se equivoca? ¿Les volvemos a votar?
Joaquín Garrido Mena
«No se puede estar cazando elefantes Botsuana, mientras en España estábamos en una semana negra y el ejecutivo estaba recortando derechos a los españoles», Garrido dixit.
Vaya, parece recién aterrizado de Marte o como si no conociera de nada a Zapatero