España va un “poquito” a la deriva porque seguimos siendo incapaces de conocer nuestra circunstancia y de hacernos con nuestros derechos. Es la idea de Ortega ya en el primer tercio del siglo pasado, y que sigue teniendo actualidad en estos momentos. Por eso hace falta, antes de que sea tarde, un gran debate de los intelectuales que aflore el movimiento de pedagogía nacional tan necesario.
En aquella Transición que pronto pasará de modélica a frustrada, se dio cancha a unos nacionalismos que, además de desleales en grado sumo a una gran nación vieja y revieja aunque a muchos les duela, la más vieja de Europa, venden su mentira y victimismo sempiternos, como charlatanes de feria. Pero he ahí que también vino, por llamado, el socialismo perdedor, en un enésimo intento de restablecer un marco de democracia liberal. Con todos. Y por enésima vez, ya estamos viendo lo de siempre. Que aquí en España, socialismo y nacionalismo que son social e ideológicamente hermanos bastardos, se hacen compinches para aherrojar a la derecha democrática, -tildada de lo contrario por heredera del franquismo-, a los extramuros del sistema. En Alemania se fundieron los conceptos para alumbrar al monstruo nazi. Nacionalsocialismo. Aquí van juntos de la mano pero no revueltos, a ver quién esquilma más al Estado al que le deben todo.
Así que este socialismo nuestro español, único en el mundo, al que le sobran de sus siglas la O y la E, viendo que se le va la vida y el poder, se encuentra alentando en estos momentos ese espíritu de lucha y de violencia tan característico en él, (por eso es único y no democrático que entendería la alternancia)), y que hará de los próximos meses un lamentable estado de la convivencia entre españoles. Ya escuchamos las consignas de siempre, ahora paradójicamente a su juventud parada, que no sabe no contesta sobre donde están los mercados esos y el sistema este, tan malos. Causantes del mal que nos abruma junto a la Banca, los ricos, la derechota fascista , la clerecía y los alemanes.
La Generalitat no acatará los fallos del TSJC sobre el bilingüismo y a tal decisión se suma con fervor nada menos que la Ministra de Defensa de España,(¡) una tal Chacón, socialista, casi candidata a Presidenta de España, olvidadiza ella y su mentor de que un día no muy lejano se paseaba detrás de una pancarta que decía lo de “p… España”.
No, no vivimos en Utopía. Este es uno de tantos frutos de ese pacto inicuo de la política de Estado en los últimos años. Los españoles estamos anclados en la inopia…supina. Y si esto es redundancia, pues lo siento.
Y como a nuestra Iglesia también se la seguirá zurrando, recuerdo algo de lo que se ha leído en la liturgia en este día de miércoles. “Dichosos vosotros, cuando os odien los hombres, y os excluyan, y os insulten, y proscriban vuestro nombre como infame, por causa del Hijo del hombre. Alegraos pues recibiréis la recompensa”. San Lucas, 6, 22.-
07-09-2011
JortizrochE
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